jueves, 27 de febrero de 2014

Tipo de personalidad Cinco

Tipo de Personalidad Cinco

Hoy nos toca analizar los rasgos de las personas que poseen el Tipo de Personalidad Cinco.

"(Son) Personas que se retiran del mundo y viven en sus mentes. Pueden ser sabios, inteligentes y versados o abstractos, avaros y esquizoides.

     Los Cinco, Seis y Siete comparten un trasfondo común de miedo y forman otro trío. A diferencia de los Dos, Tres y Cuatro, los Cinco, Seis y Siete no se confunden acerca de quiénes son ni cómo se sienten. Ellos, en lugar de eso, tienden a anticipar de manera inconsciente los peligros de la vida, y es habitual en ellos que reaccionen desde el fundamento emocional del miedo. Los Cinco, Seis y Siete generalmente son pensadores quienes viven más en sus cabezas que en sus cuerpos. Se esfuerzan por tomar acción, afirmando sus voluntades y manejando la energía.

     Los miedos del Cinco son específicamente sociales; las personas con este estilo habitualmente se mantienen en guardia contra ser invadidos o engullidos por otros. Este es el estilo más explícitamente asocial del Eneagrama. Cuando los Cinco están a la defensiva, pueden retirarse y ponerse hostiles como una forma de manejar su hipersensibilidad a los demás. Generalmente temen las relaciones íntimas dado que éstas pueden conducirlos a sentirse agobiados, sofocados o engentados (1).

     Los Cinco viven en sus mentes, en contraste con los Cuatro que habitan sus imaginaciones emocionales. Las personas con este estilo tienen capacidades bien desarrolladas para analizar y sintetizar el conocimiento. Pueden ser perceptivos, sabios y objetivos, capaces de quedarse centrados y analíticos cuando alrededor suyo otros están desconcertados o aterrados.

     Los Cinco, en su mejor estado, normalmente mantienen un equilibrio entre actuar recíprocamente con el mundo y retirarse de él. Este estilo se asocia con frecuencia con la sabiduría y, a veces, al genio intelectual. Los Cinco sanos de manera activa ofrecen al mundo el fruto de su conocimiento, a menudo a través de la enseñanza y la escritura. Pero, sea lo que sea que realicen, los Cinco sanos buscan que su talento, para aumentar conocimiento, cuente para algo más allá de ellos. Los Cinco pueden ser idealistas y a veces contribuir valientemente al bienestar social.

     Las personas sanas con este estilo también practican lo que los Budistas llaman el no-apego, una actitud caracterizada por una mezcla igual de desapego y compasión. Dentro de esta postura los Cinco pueden jugar el juego de la vida sin apegarse demasiado a los resultados y, como amigos, pueden estar capacitados para entender tu punto de vista tanto como el suyo. Son simpáticos y de buen corazón, lo mismo que capaces de ver los eventos desde una perspectiva distante y evitar ponerse personalmente perturbados.

     Cuando los Cinco son menos sanos, caen del no-apego en la disociación, el estado interno de separarse de los sentimientos. Pueden estar híper-conscientes de las demandas del mundo, y aún así responder pasivamente retirándose. La mayoría de la gente externa ve la capacidad del Cinco de retirarse como un tipo de independencia. También es una defensa; los Cinco están creando un fuerte límite asocial para compensarse por ser demasiados sensibles en primer instancia.

     Partirse a sí mismos se vuelve entonces un hábito defensivo. La idea es: Si sólo pudiera aprender a vivir con menos, podría evitar la influencia ajena. Esto los lleva a una tendencia a acumular, para salvar lo poco que tienen con la idea de necesitar lo menos posible de los demás. Los Cinco pueden acumular tiempo, dinero, espacio, tierra, información o disponibilidad emocional. No importa lo que se acumula, el patrón es el mismo; los Cinco intentan protegerse contra la inundación apilando provisiones en alguna isla interna seca.

     Los Cinco enfermos también permanecen distantes de sus propias emociones viviendo en un mundo de información e ideas. Sin embargo, cuanto más se dividen, mayormente luchan con sus sentimientos de vacío, soledad y necesidad compulsiva. Es como tratar de hablarte a ti mismo a causa de estar hambriento. En esta fase, un Cinco puede ser torpe para saber cómo se siente, dado que logra alcanzar sus sentimientos sólo a través de una sucesión muy larga de pensamientos. Los Cinco enfermos rinden culto a los dioses de la razón e intentan mirar de lejos a sus propias emociones. Esto también puede convertirse en una actitud de superioridad / arrogancia hacia otras personas.

     Cuando los Cinco están muy enfermos, pueden volverse esquizoides e imprevisibles, incluso como si las partes disociadas de ellos se dieran vuelta y se expresaran. Pueden proyectar un halo ausente, vagamente asustados o pueden ser manifiestamente asociales. Los Cinco pueden, por ejemplo, sentarse a lo largo de una fiesta y no hablar con nadie pero, más tarde, reportar haber tenido un buen momento. O podría ser que inconscientemente aparten a otros con un comentario burlón y despreciable y la agresión imprevisible. El hábito de disociarse de sus emociones puede llegar a desarrollarse tanto que los Cinco muy enfermos pueden perder contacto con la realidad, desarrollando fobias raras hacia objetos invisibles como los gérmenes, y ser propensos a las alucinaciones. Los episodios agresivos también son posibles, seguidos por explosiones de paranoia aguda".

     En el próximo post evaluaremos el Tipo de Personalidad Seis.

(1) engentado (adj.; dial.) que padece de una sensación de opresión, fastidio o angustia en sitios donde se encuentra una multitud de personas. Ejemplo: "Nos fuimos temprano del bautizo porque mi abuelita ya estaba engentada". Fuente: página en Facebook del Diccionario de coloquialismos y términos dialectales del español.



Dr. Oscar L'Argentiere - Médico M.P. 19.178
Homeópata Unicista, Iriología,
Terapia Floral, Acupuntura China,
Psicoterapia Dinámica y Transpersonal

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